El Úroboro

Sexta entrada

21 de diciembre

5:15 a.m.

Hoy es el gran día. La presentación está programada para las 7:45 a.m., cuando el sol despierta sus rayos con sopor. Ella debe bañarse, y yo la arreglaré. He comprado tres docenas de flores. Iris en mayor medida, y varias velas aromáticas de las que tanto me agradan. Prepararé un desayuno sencillo, y tengo una sorpresa reservada para el final.

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22 de diciembre

1:00 a.m.

Fue un día mágico. He sido flexible con el horario. Antes del gran concierto, desayunamos un plato de sus frutas preferidas (como siempre). He preparado Crepas Clarece. Pan Francés. Algunos  quiches.  Omelette de champiñones acompañado de un  jugo de naranja y  arándano. A las 8:15 a.m. he interpretado algo más de la época de los jóvenes, " A River  Flows  In You" de Yiruma. Después ha tocado ella y ha sido hermoso. Pude absorber cada parte de ella, me consumió su belleza, ha sido mía de la única forma que me interesa. ¡En la belleza del ser! Cada nota y cada sensación es mía. ¡Ella ahora es mía!

 Le he pedido que lo repitiera dos veces más. Es exitante recordarla, siendo bañada con los rayos del sol y con la luz que desprendían las velas.  Ella reflejó toda esa magia, cual si fuese la luna aún más bella. Podría presumir, con esa agilidad en las manos y su erguida figura, que se despojó de toda vida en la última nota. Con cada repetición, se desprendía el corazón de un capullo de flor.

Al terminó de la ultima tonada brindamos con vino. En la copa de ella puse una generosa cantidad de compuesto 1080, un plaguicida que provoca la muerte bloqueando el metabolismo celular, muerte rápida y dolorosa. Tiene la particularidad de ser soluble en agua, inodoro e insípido, y aun más si es mezclado con la delicia de Château Margaux, que lo he mandado traer de Burdeos hace meses. La he visto en su último aliento. No podía dejar que alguien más la tuviera como yo la tuve. Ahora es libre…

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24 de diciembre

11:45p.m.

Confío que el cuerpo de Sasha ya esté en posesión de sus padres, pues he arreglado que llegara envuelto y con un hermoso moño a su puerta. Claro, no sin antes tomar lo que me pertenece al haberlo moldeado tan bien… Sus manos son hermosas no hay duda de ello. ¡Feliz Navidad, familia de Sasha de Santivañez Marin!

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1 de enero

10:00 a.m.

Hace frío en el D.F. Me agrada. He conocido a un chico en la escuela de artes. Es pintor. Me gustan sus dedos…